Programa de Alfabetización de Adultos Mayores
El Club Rotario Jurica ha desarrollado desde hace más de 20 años, un programa de alfabetización de adultos mayores, en las comunidades de Santa Rosa de Jáuregui.
Durante ese periodo se han alfabetizado a más de 5,000 adultos mayores principalmente en las comunidades de La Solana,, Montenegro, Buena vista, Palo Alto, La Estacada, Casa Blanca y Cerro de la Cruz.
Este programa funciona a través de un coordinador y personas que apoyan la enseñanza, directamente en las localidades.
El Club Rotario Jurica facilita los materiales que consisten en una guía y un cuadernillo especialmente diseñado, en el que los adultos pueden ir avanzando cada uno a su ritmo. También se reconoce un monto a la coordinadora del programa y a las personas que apoyan en el seguimiento del aprendizaje. El tiempo promedio para completar el proceso de alfabetización es de 10 meses y el costo de alfabetizar a cada adulto es de aproximadamente MX$ 2,300 pesos.
En las comunidades las personas se reúnen una vez por semana con las personas que les guían y apoyan y se llevan tarea para sus hogares. A la semana vuelven y se les sigue orientando, ayudando y dejando nuevas actividades.
Para poder mantener este programa se han realizado, a través de los años, actividades diversas de naturaleza presencial con la finalidad de recaudar fondos y mantener grupos activos. Ahora, en la época de la pandemia, estamos iniciando con esta página de “Crowfunding” con el objetivo de poder promover las donaciones entre la sociedad civil, para apoyar a estos adultos en su proceso de alfabetización y otros proyectos en particular..
Cualquier cantidad que desee donar será bienvenida y estos adultos se lo agradecerán de por vida.
Las motivaciones de los adultos mayores para alfabetizarse.
María (65 años) – “Quiero que mis nietos se sientan orgullosos de que pude aprender a leer.”
Josefa (54 años) – “Nunca he visitado la ciudad porque no podía saber ni en qué calle estaba, Ahora ya puedo tomar el camión y leer los nombres de las calles.”
Rosita (68 años) – “No podía ni leer los nombres de las medicinas. Ahora me dan una receta y cuando la compro, ya sé que si es la medicina que necesito.”
